«LA COMUNIDAD DE MUJERES TRANS EN AGUASCALIENTES, UNA PERSPECTIVA ACTUAL»
• La comunidad de mujeres trans en Aguascalientes ha dado de qué hablar en la política y en la sociedad de nuestra entidad, lo cual estableció una pauta para la toma de posturas a favor y en contra de diversos sectores de la población.
Por David Julián Torres
En dicho transcurso de tiempo se han hecho públicos diferentes casos en los cuales la misma comunidad de mujeres trans denuncia abusos y acoso por parte de las autoridades, hechos que en lo legal y en lo institucional han dado resultados al menos al sembrar un germen de cambio y de sensibilización para una problemática aún mayor, la del respeto a los Derechos Humanos.
A decir de Susan Any Rodríguez Muñoz, coordinadora de la Red Mexicana de Mujeres Trans en Aguascalientes, de cinco años a la fecha se han generado varios cambios, sin embargo, la crisis por la pandemia del Covid-19 ha demostrado que se enfrentan a la misma problemática.
“De cinco años para acá, el proceso de la vida de las mujeres trans solo ha generado que tengamos aliados en distintos lugares, pero la pandemia demostró que no tienen nada de acceso al respeto, al derecho, a nada, se vio porque la mayoría de las chicas no podían tener al inicio beneficios de gobierno, se tuvo que pelear para poder hacerlo.
Se demostró que las detenciones arbitrarias siguen siendo el pan de cada día. Sí hemos trabajado con Seguridad Pública, se han modificado, se han corrido, se han denunciado, la prueba de ello sigue habiendo la denuncia en la Fiscalía, y, aunque la mentalidad de las personas en Aguascalientes es amplia, existe un sector muy rezagado, que viene siendo guiado por ciertas ideologías religiosas que lamentablemente no aprendieron nada de su decálogo, a respetar, amar y perdonar, al contrario, se sienten dioses se sienten su dios para juzgar, para señalar, para lastimar, para criticar, para dañar, para eso se sienten dioses y son simples seres humanos a los cuales se les da un derecho y los cuales tienen la obligación de respetar los derechos de las demás personas” apuntó la activista.
Rodríguez Muñoz recalcó el hecho de que dicho sector ha permeado en instituciones públicas: “(…) algunas de estas personas han ingresado a servicios públicos o de servidores públicos, en el Congreso, de la Fiscalía, Seguridad, Salud Social, etcétera, y son los que meten el pie para los cambios, son los que detienen estas modificaciones o adaptaciones que se pueden hacer directamente aunque el Congreso no haya modificado la ley para que se dé el derecho de identidad”.
La activista acusa que diputados han estado en contra de los derechos de las minorías o de las personas vulnerables, en este caso de la población LGBTTIQ (Lesbico-Gay, Bisexual, Trasvesti, Trans, Intersexual y Queer) y de las mujeres cisgénero, “todo por su ideología religiosa en pro de una vida, en pro de sus estatutos canónicos que no deberían de existir dentro de la política (…) se protegen en su libertad de expresión cuando eso sería ilegal”.
ACTIVISMO: Susan Any tuvo una situación particular en su casa, ya que su familia la apoyó en su identidad de género desde pequeña. Cuando inició su interés por independizarse se encontró con las primeras barreras de discriminación al ir a una entrevista de trabajo, por lo cual se acercó a diversas organizaciones mediante las cuales su visión sobre la situación de la comunidad trans se expandió.
Ella es técnica en máquinas y herramientas y tiene una larga experiencia en distintos temas de Derechos Humanos y también se desempeñaba como estilista en un negocio propio al cual acuden vecinos de la colonia Insurgentes.
La coordinadora de la Red Mexicana de Mujeres Trans en Aguascalientes, señaló que a grandes rasgos, la situación de dicha comunidad “no ha cambiado nada, sigue siendo la misma gata nada más revolcada. Se dice como siempre somos esto, somos aquello, somos pro, somos buenos, pero cuando se enfrentan a la realidad se demuestra que es todo lo contrario que no tuvimos acceso a trabajos, a educación, etcétera. Las únicas que hemos podido tener un pequeño avance somos o las que levantamos la voz para exigir que se nos respete, o las que hicimos un cambio de identidad por medio de un juicio, y levantamos la voz para que se respetara este derecho bajo el mandato de un juez, porque de lo contrario seguiríamos en el rezago, en la violencia, en la discriminación”.
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